martes, 23 de julio de 2013

DIFERENTES - No a la discriminación

El motivo para escribir esta entrada fueron las recientes declaraciones de algún representante de la Iglesia en Rusia de que el matrimonio igualitario era un síntoma del apocalipsis y por lo tanto había que arrojarlo fuera de Rusia. Y es que no entiendo como una religión puede justificar la negación de los derechos del resto de las personas mientras por otro lado predica la importancia del amor al prójimo. Porque hasta donde mis conocimientos de la Biblia llegan, en el nuevo testamento se nos dice que hay que amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a uno mismo. Es una incoherencia terrible, y más cuando se le suma la idea de que también me parece entender de la Biblia que el único con derecho para juzgar a otros es Dios. ¿O acaso no dicen "que arroje la primera piedra el que esté libre de todo pecado"?

No me voy a poner del lado de los ateístas fanáticos que esgrimen cosas como esas para decir que Dios no existe. Quizás tenga dudas razonables sobre si la Biblia fue escrita por Dios como se nos enseña o fue realmente producto de un hombre, pero el caso es que no se puede negar que la Biblia contiene verdades importantes y buenos consejos, por lo que al menos yo sí creo que en algunas partes fue fruto de inspiración divina. ¿Que si Dios fuera todopoderoso no permitiría este tipo de cosas de los que hablan supuestamente en su nombre? Él ya había avisado en su palabra que habría muchos falsos profetas, y por otro lado, igual de estúpido me parece esgrimir el nombre de Dios en vano que echarle la culpa de las cosas que hemos provocado los mismos seres humanos. Porque no tengo dudas que Dios podría cambiar las cosas, pero ¿por qué nos arrebataría la oportunidad de aprender por nosotros mismos lo que necesitamos, de hacernos responsables de lo que hemos hecho? Un padre podría encerrar a su hijo en una esfera de cristal donde nunca le pasará nada malo, pero es mucho más saludable dejarlo salir al mundo y que se haga responsable de sus propias decisiones. ¿Por qué Dios no haría lo mismo por nosotros como especie?

Podría haber un argumento todavía, ¿no? La Biblia condena la homosexualidad directamente. Sí, pero también dice que el hombre tiene libre albedrío dado por Dios y que como ya lo dije, él es el único que debería estar juzgando. Siendo las cosas de esa manera, ¿las personas que están en contra de la homosexualidad no deberían contentarse con no practicarla ellos y dejar vivir a los demás de la manera en que ellos quieran? Porque pienso firmemente que mientras no se dañe a terceras personas, todo debería estar permitido.

Aquí pasamos a otros argumentos aún más rídiculos, que afortunadamente ya no tienen base (al menos no directa) en la Biblia. En Rusia se dice que la propaganda gay se prohíbe para cuidar de los niños. ¿Me están diciendo que es más saludable que un niño vea como golpean a alguien hasta matarlo solo por ser diferente que ver convivir a personas diferentes tranquilamente, cada una expresándose de la manera en que quiera? Como psicólogo no puedo entender cuál es la lógica que existe debajo de ese argumento. Si un niño descubre espontáneamente que le gusta alguien de su mismo sexo, ¿cómo se va a sentir? ¿A quién va a recurrir? Porque nunca se le habló de que aquello pudiera pasar, es más, quizás nunca se lo imaginó porque nunca vio nada como aquello. O puede ser que lo haya visto, pero vio que tuvo consecuencias de violencia y muerte y podría llegar a odiarse a sí mismo por sentir eso que siempre ha visto como algo que estaba mal, que merecía esa clase de castigos. ¿A qué clase de vida puede aspirar una persona así?

Lamentablemente todo lo anterior no es algo que se vea exclusivamente en Rusia. Quizás ahorita resalta más por todas las noticias que nos llegan, pero solo tenemos que ir a la Iglesia de la colonia a preguntar al encargado o a las personas que la frecuentan que piensan sobre la homosexualidad y solo en raras ocasiones la respuesta será positiva. Podemos ir a un kínder o a una primaria cercanas, y preguntarles a los maestros si alguna vez han trabajado o hablado sobre la diversidad, y veremos que nunca. Y aquellos que lo hayan hecho, seguramente poco después tuvieron a los padres de familia encima de ellos por hablarles de ese tema a los niños. ¿Por qué nos espantamos señores? Tampoco se trata de que los niños se enteren de los pormenores íntimos de una pareja homosexual (así como tampoco se van a enterar de los de una heterosexual), pero sí que sean conscientes que así como ven a su papá y mamá juntos, a sus tíos y primas con novias y novios, así también puede ser que en la vida se encuentren con parejas formadas por personas del mismo sexo, y que no por eso tienen menos derechos que los demás, o que por ello tienen derecho a hacerlos menos o a insultarlos. No se trata de decirle al niño "Vuélvete gay", se trata de que aprenda a respetar a todas las personas independientemente de con quien estén.

Porque eso nos urge como sociedad, cultivar el respeto hacia los demás por el simple hecho de ser humanos. Porque no solo se trata de la homofobia, también de la xenofobia, la discriminación de género, por religión... Vaya, si parece que no podemos respetar a nadie que no sea como nosotros. Y es aún más rídiculo ver como una sociedad como la gay que es fuertemente discriminada discrimina a otros. Porque me ha tocado ver gays que discriminan a otros por ser pasivos, por ser locas, por ser muy obvias... vaya, y eso sin sumarle la transfobia que a veces existe. Urgentemente necesitamos aprender a amarnos, para que mientras no me lastime a mí o a otros lo que hace determinada persona me valga madres. Necesitamos aprender que las diferencias no nos hacen mejores ni peores personas, solo DIFERENTES, y que esas diferencias por tanto deberían disfrutarse y no señalarse, deberían servirnos para aprender de otros y no para discriminarlos.

miércoles, 17 de julio de 2013

Nuevas perspectivas sobre el amor

Bueno, ya en otras entradas he hablado de lo que creo que es el amor. Y mientras más reflexiono sobre ello me doy cuenta que es algo demasiado complejo. Antes de continuar, creo importante resaltar que lo que escribo aquí es producto de mi propia reflexión, y si bien he leído sobre el tema como ya lo he comentado no podría afirmar pero tampoco negar que lo que diga ya haya sido dicho por alguien más reconocido.

En fin... En últimas fechas me he dado cuenta el porqué es tan difícil diferenciar al amor de la obsesión, el encaprichamiento y otras tantas cosas parecidas. Porque creo que cuando amas a alguien, lo que sucede es que quieres lo mejor para esa persona. Sin embargo, dado que el amor solo puede darse una vez que uno se ama a sí mismo, parece obvio que vas a creer que tú eres lo mejor que esa persona puede tener.

Es ahí donde comienzan las diferencias, sutiles pero significativas. Porque aunque un encaprichado también pueda decir que quiere estar con esa persona porque su amado jamás va a encontrar a alguien mejor que señor(a) caprichitos, el que ama de verdad no perderá de vista que aunque haya cosas en las que sea el mejor también habrá otras en las que no será tan bueno. Y quizás esa persona a la que uno ame necesita algo muy diferente a lo que uno puede darle. En el mejor de los casos esa persona necesitará lo que nosotros realmente podemos darle, y entonces si habrá una oportunidad.

No obstante, todavía falta que esa persona sea lo que necesitamos nosotros. Porque quizás sea cierto que somos lo mejor que puede haber para esa persona en específico, pero también falta que esa persona sea lo mejor que podamos tener. Y no me refiero al dinero, o la posición social, me refiero a aquellas características más profundas que componen el verdadero ser de la persona. Porque alguien que se ama a sí mismo va a esperar lo que cree que se merece, y ese merecimiento no puede ser menos que otra persona que se ame a sí misma. En cambio, el obsesionado dirá que no importa como sea aquella persona, porque el amor se trata de una aceptación incondicional. Sí, es incondicional, pero primero va uno y luego van los demás. Quizás pueda amar a alguien más, pero si yo sé que eso va a ir en contra de amarme a mí mismo pues mejor le digo adiós y cada quien por su camino. Decirle "Te amo pero me amo más", es lo más saludable antes de caer en una relación de codependencia.

Otra idea aún más estúpida es el "amor todo lo puede, y por eso mi amor va a hacerlo cambiar". Esa frase sí que está buena. El que el amor todo lo pueda no quiere decir que nos va a dar oportunidad de cambiar a la otra persona tal como nosotros creemos que debería ser. El decir que el amor lo puede todo creo yo que es algo más profundo que todavía no comprendo del todo. Sin embargo si tengo claro que no se trata de cambiar a otros. Creer eso sin duda alguna nos llevará a una relación de codependencia. Si no me creen vean la película Cuando el Amor no es Suficiente, que habla sobre la creación de AA y Al-Anon. Me gustó mucho esa película, porque me hizo cuestionar muchas de mis ideas sobre lo qué era el amor.

Con todo lo que he dicho, cuando pensamos a fondo no es sorprendente que muchos no tengamos idea de lo que es el amor, y también resulta obvio el porqué en muchas series y películas nos lo pintan con tintes de encaprichamiento, apasionamiento y obsesión. Porque si tiene parecidos con ellos, sin embargo, en lo profundo es muy diferente. Pero estamos tan acostumbrados a prestar atención solo a los aspectos superficiales de las cosas, que nos resulta imposible discernir uno del otro.

jueves, 11 de julio de 2013

Literatura basura

Últimamente he visto en internet muchas críticas contra Paulo Coelho y otras tantas contra la saga de 50 sombras de Gray (si a lo que veo se les puede considerar críticas). Personalmente nunca he leído nada de eso, sin embargo, con tanta publicidad la verdad es que ya me están dando ganas de leerlos. Digo, no paro de oír comentarios negativos acerca de esos libros, y sin embargo, también veo gente que reacciona muy enfadada porque atacan lo que ellos consideran sus libros favoritos. Honestamente, no entiendo ninguna de las dos posturas. Los que se la pasan criticándolos suelen ser las personas que se creen "cultas" o intelectuales; sin embargo, no me parece que tenga mucho de culta una persona que se la pasa menospreciando a los demás solo porque leen algo que en su consideración es inferior o no cumple los criterios para considerarse una obra de arte. Digo, cada quién tiene derecho a leer lo que se le pegue la gana, ¿no? O de que se trata. Porque el plan de buscar criticar a los otros por cualquier cosita (porque no lee, o porque si lee lo hace con algo que a mí no me gusta) me parece sumamente hipócrita, además de que se deja de tener en cuenta que como bien dice el dicho "en gustos se rompen géneros". Si tan culto e intelectual me creo, ¿por qué no puedo aceptar sencillamente que los otros tienen gustos muy diferentes a los míos?

Y ahora vamos al otro lado, a los que se ponen inmediatamente a la defensiva cuando alguien dice un chiste sobre sus libros favoritos. De ese lado puedo entenderlos un poco más, porque entre mis libros favoritos están los que ha escrito Stephenie Meyer, sí, esa escritora de una popular saga de vampiros que en palabras de muchos realmente no son vampiros (por decirlo de la manera agradable). Y no me avergüenzo de decirlo, porque la verdad nunca me gustó la literatura clásica de vampiros (aunque no por eso despotricaba conta ella cada vez que tenía la oportunidad), así que Crepúsculo, al salir de la literatura clásica de vampiros me encantó. Además, se trata de una lectura muy sencilla y comprensible, y a mí me enseñaron que los mejores libros son aquellos que usan un lenguaje que puede ser entendido fácilmente por cualquiera.

Pero volviendo al punto, dije que puedo entenderlos un poco más, pero no completamente. Yo cuando veo chistes sobre Crepúsculo me encantan y me echo a reír, no me pongo todo funky y empiezo a soltar peladeces en contra de quien se haya atrevido a proferir el chiste o escribirlo. Prefiero reírme porque soy consciente que hay partes de Crepúsculo que se prestan muy bien para esas bromas. Y cuando oigo críticas como la de Stephen King sobre que "Crepúsculo trata sobre la importancia de tener novio", no me queda más que aceptar la verdad tras esas palabras. Pero eso no hace que me guste menos, y no entiendo porque aunque el tema no sea lo mejor que se ha escrito eso significaría que yo soy una persona que vale menos o con una menor inteligencia que aquellas personas que se dedican a leer solamente clásicos.

Ahí tienen las razones por las cuáles no entiendo porque enfrentarse entre aquellos fans de obras como las de Stephenie Meyer y Paulo Coelho y sus detractores. Una vez escuché una frase que me gustó mucho: "Las diferencias se hicieron para disfrutarse, no para señalarse". Creo que cuando entendamos que independientemente de lo que leamos o no leamos somos seres humanos valiosos tendremos muchos menos conflictos. Digo, un chiste de vez en cuando está bien, pero no me parecen chistes comentarios como "es una basura", "los que lo leen seguramente son retrasados mentales", etc. Porque no creo que en el fondo haya diferencia entre la discriminación por gustos literarios y aquella que se da por raza, religión u orientación sexual. Y recordemos que esa clase de discriminación ha dado origen a crímenes bastante graves en la humanidad.